Granada Mollar de Elche: La reina de las granadas
Granada Mollar de Elche DOP es mucho más que una fruta: es un símbolo de calidad, tradición y sabor del Mediterráneo. Conocida como “la reina de las granadas”, esta variedad autóctona alicantina destaca por sus características únicas y un legado histórico-cultural que la convierte en orgullo de la región. A continuación, te invitamos a descubrir todo sobre la granada mollar de Elche: su historia milenaria, los secretos de su cultivo, sus beneficios para la salud, usos en la gastronomía, calendario de cosecha, importancia económica y curiosidades que la diferencian de otras variedades.
Presentación: historia, cultivo y características únicas
La granada mollar de Elche tiene sus orígenes en la antigüedad. Evidencias arqueológicas encontradas en el yacimiento de La Alcudia (Elche) demuestran que ya en el siglo II-I a.C. este fruto se cultivaba en la zona. Se cree que fueron los cartagineses quienes introdujeron el granado en tierras mediterráneas tras las guerras púnicas, y más tarde los árabes difundieron su cultivo por España. Siglos después, a mediados del siglo XIX, los huertos de Elche reemplazaron olivos por granados, iniciando una tradición agrícola cuyo primer registro comercial data de 1864. Desde entonces, la granada mollar ha pasado de ser un cultivo local a una de las granadas más valoradas del mundo, conservando siempre su esencia mediterránea.
Características del fruto:
La variedad mollar de Elche se reconoce al instante por su sabor y aspecto. Su pulpa es excepcionalmente dulce y aromática, muy apreciada por consumidores y chefs. A diferencia de otras granadas, sus semillas (“pepitas”) son muy blandas y totalmente comestibles, lo que permite saborear los granos sin esa textura leñosa de otras variedades. Otro rasgo curioso es su color exterior variable: la cáscara puede ir de un tono crema dorado a un rojo intenso dependiendo de la exposición al sol en el árbol. Este “capricho de la naturaleza” hace que en un mismo campo haya granadas de piel más clara (las de interior del árbol, más sombreadas) y otras de piel rojiza brillante (las de la parte externa, más soleadas) Independientemente del color de su piel, todas esconden un tesoro interior de semillas color rubí rosado o rojo, llenas de jugo dulce y propiedades saludables.
El cultivo de la granada mollar se concentra en el privilegiado entorno del sur de Alicante, a orillas del Mediterráneo. Los campos de granados se benefician de un clima semiárido con inviernos suaves, veranos cálidos y escasas lluvias, condiciones ideales para obtener frutos dulces. Actualmente, 40 municipios de las comarcas alicantinas del Baix Vinalopó, Vega Baja y L’Alacantí conforman la zona de cultivo protegida de esta variedad. En total suman alrededor de 3.000 hectáreas de granados, que producen unas 50.000 toneladas por campaña. Este territorio es conocido como “la tierra de las granadas de Europa”, ya que concentra el 75-90% de la producción de granadas de España y es el principal productor europeo de este fruto. Los agricultores locales, a menudo familias que han cuidado los granados por generaciones, atesoran un saber tradicional sobre el momento óptimo de recolección y los cuidados del árbol, garantizando la calidad excepcional de cada cosecha. Sus huertos conviven en armonía con espacios naturales protegidos (como las Salinas de Santa Pola, El Hondo o las Lagunas de La Mata-Torrevieja), reflejando la integración de la agricultura con el entorno mediterráneo.
Denominación de Origen Protegida (DOP) y su importancia
La excelencia de la granada mollar de Elche ha sido reconocida oficialmente con el sello de Denominación de Origen Protegida (DOP), la distinción de calidad agroalimentaria más prestigiosa de Europa. De hecho, es la única granada del mundo que cuenta con una DOP propia, lo cual subraya su carácter singular. Este logro se gestó gracias al esfuerzo conjunto de productores locales: en 2008 se creó la Asociación de Productores y Comercializadores de Granadas de Elche con el objetivo de conseguir esta protección para una fruta tan especial. Finalmente, la Unión Europea otorgó la DOP “Granada Mollar de Elche” el 26 de enero de 2016.
¿Qué implica la DOP? En primer lugar, garantía de autenticidad y calidad diferenciada. Solo las granadas mollar de Elche de categoría primera o extra, cultivadas en los 40 municipios autorizados y que cumplen estrictos controles de calidad, pueden llevar el sello DOP. Este sello certifica que el fruto posee las cualidades únicas conferidas por su terruño y método de cultivo tradicional. El dulzor característico, la semilla blanda y el color peculiar son atributos protegidos por la DOP, asegurando al consumidor que está adquiriendo la genuina granada de Elche con todas sus propiedades originales. Además, al estar bajo DOP, la fruta es sometida a controles adicionales en campo y poscosecha, lo que eleva aún más su estándar de calidad frente a otras granadas comunes.
La DOP no solo reconoce la calidad del producto, sino que también valora la herencia cultural e histórica vinculada a su cultivo. Cada granada mollar DOP representa siglos de tradición, la sabiduría transmitida de padres a hijos en las familias agricultoras y las singularidades de un territorio único. Para los productores locales, formar parte de la DOP implica unión y fuerza conjunta para promocionar la fruta y defender sus intereses. El Consejo Regulador de la Granada Mollar de Elche – presidido actualmente por Francisco Oliva – trabaja activamente en campañas de promoción, acuerdos con chefs de renombre y búsqueda de apoyos institucionales. Gracias a ello, el nombre de Elche y su granada resuenan dentro y fuera de España, y el consumidor puede reconocer en el mercado una marca de calidad confiable.
Cabe destacar que la zona geográfica amparada por la DOP abarca precisamente los términos municipales de L’Alacantí, Baix Vinalopó y Vega Baja (todos en la provincia de Alicante). Esto ha permitido proteger la producción local frente a imitaciones, respaldando la economía agrícola de la región. En resumen, la DOP Granada Mollar de Elche no solo distingue a una de las mejores granadas del mundo, sino que también preserva un patrimonio agrícola, gastronómico y cultural que es seña de identidad del Bajo Vinalopó y la Vega Baja.
Beneficios nutricionales y para la salud
La granada mollar de Elche no solo deleita el paladar, sino que también es apreciada como “superfruta” por sus numerosos beneficios para la salud. Su composición nutricional y fitoquímica la convierten en un alimento funcional capaz de contribuir al bienestar más allá de su valor nutritivo. A continuación, resumimos sus principales aportes nutricionales y propiedades saludables:
Rica en antioxidantes: La granada mollar es fuente abundante de polifenoles (en especial punicalaginas) que le otorgan un poder antioxidante extraordinario. De hecho, su capacidad antioxidante es hasta tres veces superior a la del vino tinto o el té verde. Estos antioxidantes protegen las células del daño oxidativo, retrasando el envejecimiento celular y ayudando a prevenir enfermedades degenerativas. Estudios señalan que el consumo regular de granada puede reducir el riesgo de ciertos cánceres (como mama o próstata) y frenar el avance de enfermedades neurodegenerativas: por ejemplo, el zumo de granada podría retrasar la aparición del Alzheimer.
Salud cardiovascular: Incluir granada mollar en la dieta aporta cuidados para el corazón. Según expertos médicos, su consumo habitual ayuda a reducir la presión arterial (especialmente la sistólica), disminuir el colesterol LDL o “malo”, y mejorar la glucemia en sangre. Estos efectos significan un menor riesgo de hipertensión, arteriosclerosis y diabetes, tres enemigos del sistema cardiovascular. Asimismo, los granos de la mollar contienen fibra y ácidos grasos poliinsaturados (como el ácido púnico) presentes en la semilla, que contribuyen a la salud del corazón. Sus antioxidantes protegen el endotelio de los vasos sanguíneos, dificultando la formación de placas de ateroma (responsables de infartos). En resumen, la granada es una aliada para un corazón y cerebro más sanos.
Propiedades digestivas y antiinflamatorias: La granada mollar tiene cualidades astringentes gracias a su contenido en taninos, lo que tradicionalmente se ha empleado para aliviar trastornos digestivos como la diarrea. También se le atribuyen efectos antiinflamatorios, ayudando a reducir dolores articulares en casos de artritis. Por otro lado, contribuye a la salud bucodental (efecto antibacteriano en encías) y se ha observado que ciertos compuestos de la granada benefician la microbiota intestinal y la salud de la piel.
Baja en calorías y rica en micronutrientes: Esta fruta es ideal en dietas saludables y de control de peso. Más del 85% de su contenido es agua y apenas aporta ~33-35 kcal por 100 gramos, siendo prácticamente libre de grasas. Aun así, ofrece fibra dietética (sacia con pocas calorías) y es naturalmente diurética, ya que su alto contenido en potasio favorece la eliminación de líquidos. En cuanto a vitaminas, destaca por su aporte de vitamina C (antioxidante y reforzante del sistema inmune), vitamina A, E y del grupo B (especialmente B6), así como ácido fólico (B9). También contiene vitamina K y minerales como potasio (265 mg por fruto mediano), algo de fósforo, magnesio y hierro, aunque en cantidades modestas. Esta combinación hace de la granada mollar un complemento nutricional muy equilibrado: hidratante, ligero y rico en micronutrientes esenciales.
Otros beneficios sorprendentes: Por su impacto positivo en la circulación sanguínea, popularmente a la granada se la ha llamado “la viagra natural”, atribuyéndole la capacidad de mejorar la fertilidad y la calidad del esperma. Si bien esta denominación simpática debe tomarse con prudencia, ejemplifica la larga lista de virtudes atribuidas a este fruto milenario. En resumen, incorporar granada mollar de Elche a nuestra dieta regular es una excelente decisión para disfrutar de salud y sabor al mismo tiempo.
Usos gastronómicos y recetas populares
En la gastronomía, la granada mollar de Elche brilla por su versatilidad. Sus granos jugosos aportan un toque de color, textura crujiente y dulzor equilibrado a infinidad de platos tanto dulces como salados. A continuación, exploramos algunas formas de disfrutarla en la cocina:
En fresco, en ensaladas y guarniciones: Es quizás la forma más común y sencilla. Desgranar una granada mollar y espolvorear sus rubíes sobre una ensalada verde eleva el plato al instante. En la comarca es tradicional la ensalada de otoño con escarola, granos de granada, aceitunas partidas, ventresca de atún, cebolla tierna y aliño de vinagreta de granada, combinando sabores dulces y salados. También se añade granada a guarniciones de asados o platos de caza, donde su dulzor contrasta con las carnes. Gracias a su semilla blanda, se puede masticar el grano entero sin notar durezas, lo que la hace ideal para consumir directamente, añadir a yogures, cereales, bowls saludables o como topping de tostas y aperitivos creativos.
Zumos y bebidas: El zumo de granada es uno de los productos estrella derivados de la mollar de Elche. Se puede tomar recién exprimido para obtener todos sus nutrientes (su color es rosado claro debido a la menor acidez y antocianos que otras variedades, pero con gran dulzor). Este jugo se consume solo o en combinados (por ejemplo, cócteles sin alcohol, limonadas con granada, smoothies detox, etc.). En la región, empresas locales como Granavida comercializan zumo 100% de granada mollar pasteurizado, disponible en tiendas físicas y online. Es una forma cómoda de disfrutar sus beneficios durante todo el año. Otra bebida tradicional es la granada en almíbar o los licores y vermuts aromatizados con granada, que algunos artesanos producen en pequeñas cantidades.
Repostería y postres: La granada aporta un toque gourmet a numerosos postres. Se utiliza para coronar tartas, cheesecakes, panna cottas o mousses, aportando frescura y un contraste de color. En repostería local encontramos la mermelada de granada, perfecta para acompañar quesos y patés, o rellenar pasteles. También se elaboran siropes y reducciones de granada que sirven de salsa a postres y helados. Hablando de helados, en Elche algunos establecimientos emblemáticos ofrecen helado artesanal de granada mollar, muy apreciado por su sabor auténtico. La miel con granada es otra delicatessen que combina miel de azahar con concentrado de granada, fusionando dos productos mediterráneos.
Alta cocina y recetas creativas: Gracias a iniciativas locales, la granada mollar ha encontrado un lugar en la cocina de vanguardia. Cada año, la DOP organiza un Concurso de Cocina Creativa con Granada Mollar de Elche, donde chefs profesionales y amateurs compiten presentando platos innovadores. De estos certámenes han surgido recetas originales: carpaccios de gambas con granada, gazpachos de granada, guisos de pollo con salsa de granada, sushis y ceviches con granada, e incluso reinterpretaciones de postres internacionales incorporando nuestro fruto. Estas creaciones demuestran que la granada mollar no tiene límites en la cocina: su dulzor equilibrado y aroma la hacen igual de válida para platos salados que dulces. Es común verla en los restaurantes locales durante el otoño en arroces, ensaladas templadas, platos de pescado (por ejemplo, una emulsión de granada sobre lomos de dorada) o en maridaje con quesos y frutos secos en aperitivos.
Además de su uso culinario directo, existen numerosos productos derivados de la granada mollar de Elche en el mercado, fruto de sus cualidades tanto internas como de su piel. Algunos de los más populares son:
Conservas y salsas: mermeladas, jaleas, chutneys y reducciones de granada, ideales para cocinar o acompañar carnes.
Productos gourmet: vinagres y aderezos a base de granada; miel de granada; té e infusiones frutales con granada deshidratada.
Cosmética natural: la industria cosmética aprovecha el poder antioxidante de la cáscara y el aceite de semilla de granada para fabricar cremas anti-edad, mascarillas faciales, geles de ducha y champús enriquecidos. Sus polifenoles y vitaminas benefician la piel y el cabello, ofreciendo una alternativa natural en belleza.
Suplementos nutricionales: cápsulas de extracto de granada, concentrados y polvos para disolver, destinados a quienes buscan una dosis extra de antioxidantes.
Otros: la granada también se ha incorporado a productos como barras de cereal, snacks deshidratados (granos de granada secos), e incluso en la elaboración de vinagres balsámicos y combinados de vinagre con jugo de granada para aliños.
Como vemos, la granada mollar de Elche se disfruta de mil maneras, desde la receta casera más simple hasta la alta cocina de autor. Su popularidad en la gastronomía saludable va en aumento, pues es un ingrediente local, de temporada y cargado de beneficios. ¡Anímate a experimentar con ella en tu cocina!
Calendario de cosecha y sostenibilidad del cultivo
Calendario de cosecha y temporada:
La granada mollar de Elche es la reina del otoño en cuanto a frutas de temporada se refiere. Su ciclo anual de cultivo determina cuándo podemos disfrutarla en su máximo esplendor. A continuación, un breve calendario estacional:
Primavera (marzo – mayo): Los granados florecen con llamativas flores rojo anaranjado. La floración ocurre en primavera tardía, anunciando la futura cosecha. Las flores, además de ser hermosas, son esenciales para el cuaje del fruto.
Verano (junio – septiembre): Periodo de desarrollo y maduración. Los frutos van engordando bajo el sol mediterráneo y adquiriendo sus tonos crema o rosados. Durante el caluroso verano, los agricultores vigilan el riego para asegurar granadas de buen tamaño y dulzor.
Otoño (octubre): Inicio de la cosecha. A comienzos de octubre arranca la recolección de la granada mollar de Elche, cuando los frutos alcanzan su punto óptimo de madurez. Octubre es el mes por excelencia de la granada: los campos se llenan de actividad con cuadrillas de recolectores cuidadosamente cortando las granadas a mano, fruto a fruto, para evitar daños.
Finales de otoño e invierno (noviembre – enero): Comercialización y consumo. Tras la primera recogida, la campaña continúa durante noviembre, diciembre e inicios de enero, meses en los que las granadas mollar están disponibles en mercados locales, supermercados y para exportación. La temporada oficial suele concluir a finales de enero o principios de febrero, cuando ya se han recolectado los últimos frutos tardíos. Gracias a técnicas de conservación en frío, es posible encontrar granada de Elche hasta febrero sin perder calidad, aunque lo más común es consumirla durante las Fiestas Otoño-Invierno (muchas familias la incluyen en sus mesas de Navidad y Año Nuevo por su simbolismo de prosperidad).
Este calendario natural hace que asociemos la granada mollar al otoño, época en que se le ha llegado a apodar “la Reina del Otoño” por ser la fruta estrella de esa estación. Consumirla en temporada garantiza el mejor sabor y precio, apoyando además la sostenibilidad al consumir producto local en su momento justo.
Sostenibilidad en el cultivo de la granada mollar
El cultivo de la granada mollar de Elche cuenta con varios factores que favorecen la sostenibilidad ambiental y socioeconómica:
Adaptación al clima y uso eficiente del agua: El granado es un árbol rústico y relativamente tolerante a la sequía en comparación con otros frutales. Esto significa que, en la zona semiárida de Elche-Vega Baja, requiere menos recursos hídricos que cultivos alternativos, algo clave en una región donde el agua es un bien escaso. La mayoría de productores emplean riego por goteo y técnicas de manejo eficiente del agua, evitando despilfarros. Además, se están impulsando proyectos pioneros para utilizar agua regenerada (reutilizada) en el riego de huertos tradicionales, reduciendo la presión sobre acuíferos y trasvases. Este compromiso con el ahorro de agua hace del cultivo de la granada un modelo a seguir en sostenibilidad hídrica.
Bajo impacto y biodiversidad: Los granados ilicitanos conviven con importantes espacios naturales, lo que ha fomentado prácticas agrícolas responsables. Muchos agricultores optan por control biológico de plagas y reducen el uso de químicos, para proteger la rica biodiversidad de la zona (insectos polinizadores, aves, suelo). La presencia de la agricultura de granado actúa además como cortafuegos verde en zonas áridas, protegiendo el suelo de la erosión y manteniendo el paisaje agrícola tradicional, en sinergia con el famoso palmeral de Elche.
Aprovechamiento integral del fruto (economía circular): Casi nada se desperdicia de la granada mollar. Ya en el siglo XIX se exportaban toneladas de corteza de granada desde Elche hacia la industria curtidora y farmacéutica, aprovechando sus taninos para teñir cueros y usos medicinales. Hoy día, la piel de la granada – rica en antioxidantes – se emplea para producir extractos destinados a cosméticos y suplementos alimenticios, como mencionamos en apartados anteriores. Las membranas y subproductos orgánicos del despiece de la fruta pueden compostarse y devolverse a la tierra como abono. Incluso la madera del granado, tras la poda, puede aprovecharse como biomasa. Este aprovechamiento integral reduce residuos y genera valor añadido, cerrando el ciclo de vida del producto de forma sostenible.
Denominación de Origen y desarrollo local: La DOP Granada Mollar de Elche no solo certifica calidad, sino que promueve también la sostenibilidad socioeconómica. Al agrupar a pequeños y medianos agricultores bajo un paraguas común, se asegura un precio justo para el productor, se fijan población rural al territorio y se mantiene viva una actividad agrícola tradicional. Las campañas de promoción del Consejo Regulador enfatizan el consumo de cercanía y educan al público sobre la importancia de conservar estos cultivos. Todo ello contribuye a un modelo de desarrollo local en el que producción y medio ambiente van de la mano.
En definitiva, la granada mollar de Elche representa un equilibrio entre tradición y modernidad en su cultivo: aprovecha los conocimientos heredados de generaciones, implementa mejoras tecnológicas sostenibles y respeta la naturaleza que la rodea. Al elegir granada mollar DOP, el consumidor también apoya esta forma de producción responsable.
Relevancia económica y cultural en la región de Elche y Vega Baja
La granada mollar de Elche no solo es un producto agrícola; es un motor económico y un emblema cultural para la región de Elche, el Bajo Vinalopó y la Vega Baja del Segura. Su impacto se refleja en cifras, tradiciones y en el paisaje local.
Importancia económica: Cada campaña de granada genera miles de puestos de trabajo y aporta prosperidad a las zonas rurales. Se estima que la cosecha anual de granada mollar de Elche genera más de 3.000 empleos directos (peones agrícolas, técnicos, personal de almacén y logística) y alrededor de 1.000 empleos indirectos, ligados al transporte, comercialización y transformación industrial. Con unos 500 agricultores inscritos en la DOP, en su mayoría explotaciones familiares, la granada proporciona una fuente de ingresos estable para muchas familias de Elche, Crevillente, Albatera, Vega Baja, etc. La superficie cultivada (3.000 ha, de las cuales ~1.000 están dentro de la DOP) y la producción (50.000 toneladas) posicionan a esta fruta como uno de los pilares del sector primario provincial. De hecho, Alicante lidera la producción europea de granada gracias principalmente a la variedad mollar. Aproximadamente el 50% de la cosecha se destina al mercado nacional, donde el consumo ha crecido más de un 30% en los últimos años. La otra mitad se exporta a mercados internacionales (Francia, Reino Unido, Países Bajos, Italia, etc.), lo que coloca a Elche en el mapa agroalimentario mundial. En palabras del alcalde de Elche, “Elche es una de las principales locomotoras del sector primario de España”, gracias en parte a productos estrella como la granada mollar. Cada fruto que sale de estos campos lleva el nombre de Elche a cientos de fruterías y hogares, difundiendo la reputación de la comarca por su calidad agrícola.
Raíz cultural e identidad local: La granada está profundamente arraigada en la cultura ilicitana. Un ejemplo notable es su presencia en el Misteri d’Elx, el drama sacro declarado Patrimonio de la Humanidad. En esta representación medieval, aparece la célebre “Magrana”, un aparato escénico en forma de granada gigante que desciende del cielo de la Basílica de Santa María abriéndose para revelar un ángel en su interior. Esta Magrana, cuyo origen se remonta al siglo XVI, simboliza la ascensión de la Virgen y es uno de los momentos más emotivos de la obra. Su sola existencia evidencia la importancia del fruto en el imaginario colectivo local. De hecho, en el pliego oficial de la DOP se incluyeron referencias e imágenes de la Magrana del Misteri d’Elx para documentar la conexión histórica entre este cultivo y la cultura de Elche. No es de extrañar, pues, que la Asociación de Productores de Granadas de Elche patrocinara la restauración de la Magrana en 2014, devolviendo así parte de lo que este símbolo aporta a la identidad local.
Las tradiciones populares de la Vega Baja también recogen a la granada como protagonista. En el municipio de Rafal, por ejemplo, existe desde hace más de un siglo la Procesión de la Graná en Semana Santa: durante el Encuentro del Domingo de Resurrección, una granada gigante de cartón piedra, llena de pétalos y aleluyas, se abre en honor al Cristo resucitado. Esta singular costumbre religiosa demuestra cómo la granada ha inspirado celebraciones locales y simbolismos de renovación, fertilidad y vida.
El legado cultural de la granada se aprecia también en el paisaje urbano: Elche cuenta con una rotonda monumental dedicada a la Granada Mollar de Elche, con una escultura moderna de un fruto abierto a gran escala, homenaje a este emblema agrario. Igualmente, se han inaugurado parques temáticos y rutas agroturísticas que giran en torno a los huertos de granados, permitiendo a visitantes conocer de cerca el proceso de cultivo y la historia detrás de la fruta.
En resumen, la granada mollar de Elche “vertebra el territorio”, como señalan las autoridades, porque está presente en la economía, el paisaje, las fiestas y hasta en el corazón de la gente que habita esta tierra. Es un símbolo de orgullo local que ha trascendido fronteras. Consumir una de estas granadas no es solo saborear una fruta deliciosa; es también conectarse con la tradición viva de Elche y la Vega Baja, con el trabajo de sus agricultores y con siglos de historia mediterránea.
Datos curiosos y valor diferencial frente a otras variedades
Para cerrar este recorrido, presentamos algunos datos curiosos sobre la granada mollar de Elche y las claves que la distinguen de otras variedades de granada:
La única granada con DOP en el mundo: Como ya mencionamos, ninguna otra variedad de granada posee Denominación de Origen Protegida. Esto convierte a la mollar de Elche en la “reina” indiscutible entre cientos de variedades existentes. Su calidad y singularidad están oficialmente reconocidas a nivel europeo, algo de lo que productores y vecinos de Elche se sienten justamente orgullosos.
Origen etimológico – “mollar” significa blando: El nombre “mollar” alude a su atributo más característico: la semilla blanda. En español, mollar se relaciona coloquialmente con lo tierno o fácil de moler. Efectivamente, las pepitas de la granada mollar casi se deshacen al masticarlas, a diferencia de las variedades de semilla dura. Esta cualidad única hace que incluso quienes normalmente no comen la semilla de la granada (por resultarles molesta) disfruten por completo de los granos de la mollar de Elche.
Color externo engañoso, interior exquisito: A diferencia de las granadas de variedades foráneas (como la Wonderful, muy común en otras latitudes) que exhiben cáscaras de rojo intenso uniforme, la granada mollar puede mostrar pieles más claras o sonrosadas. Esto no significa que esté menos madura; es parte de su encanto varietal. De hecho, su interior suele ser de un rojo rosado brillante y su dulzor supera al de granadas de cáscara más roja. Es decir, no juzgues a la granada mollar por su color exterior: debajo de una piel crema puede ocultar los granos más dulces. Los expertos señalan que el tono externo más pálido se debe al menor contenido de antocianinas (pigmentos rojos), pero esa misma característica va ligada a una acidez más baja, por eso su sabor resulta tan agradable y equilibrado.
Simbología de la fertilidad y la belleza: La granada ha simbolizado la fertilidad, la abundancia y la belleza en múltiples culturas a lo largo de la historia. En el caso de Elche, no solo aparece en el Misteri d’Elx como hemos visto, sino que en el Museo Arqueológico local se exhiben fragmentos de cerámicas íberas donde las granadas rodeaban a deidades femeninas, posiblemente representando fecundidad y conexión con el más allá. Asimismo, Afrodita, la diosa griega del amor, según la leyenda plantó el primer granado en Chipre, otorgándole desde entonces esa connotación pasional. Incluso, curiosamente, el nombre de la ciudad de Granada en España proviene del fruto, y este aparece estilizado en el escudo del Reino de Granada y en el escudo nacional de España, simbolizando la unificación histórica del país. Pocas frutas tienen un peso tan fuerte en la mitología, el arte y la heráldica.
“Rubíes” comestibles y premios internacionales: Los granos de la granada mollar suelen llamarse poéticamente rubíes por su brillo y color. Y no es para menos: han conquistado paladares en diversos rincones. En 2020, por ejemplo, una granada mollar de Elche fue premiada en un certamen como “la granada más bonita de España”, reconociendo su aspecto excepcional y calidad interna. A nivel gastronómico, chefs con estrellas Michelin han creado platos exclusivos con esta fruta, y su zumo ha sido elogiado en ferias internacionales de alimentación por su sabor dulce único. La mollar de Elche se ha convertido en un referente de alta calidad dentro y fuera de España, ganándose el apodo de “Joya de la Corona” entre las frutas de otoño.
Estos datos y curiosidades refuerzan el valor diferencial de la granada mollar de Elche frente a otras variedades: su combinación de sabor dulce, semilla blanda, historia milenaria y reconocimiento oficial la hacen verdaderamente inigualable. Si aún no la has probado, te animamos a que lo hagas y descubras por qué tantos la consideran la mejor granada del mundo.